Tres
temas fueron tratados: justicia indígena, extractivismo y concesiones mineras
en territorios de los saraguros y la situación organizacional y política de
Zamaskijat.
Centinela del Cóndor.- Durante una asamblea extraordinaria
realizada en la parroquia Panguintza, se llevó a cabo un foro al que acudieron
varios miembros de organizaciones indígenas, socios de la federación de los
nueve cantones de la provincia y Salvador Quishpe Lozano, Prefecto de Zamora
Chinchipe.
Rogelio
Andrade, presidente de Zamaskijat, al hablar del tema de justicia indígena
expresó que el Consejo de la Judicatura debe capacitar en el ámbito legal a los
presidentes de las organizaciones comunitarias y cantonales para que de esta
manera se pueda tener al fin una coordinación y cooperación de justicia
indígena con la ordinaria.
Referente
al tema minería, Salvador Quishpe manifestó que su oposición a esta práctica
siempre ha sido debido al daño ambiental que deja en los territorios, sin
embargo, puntualizó que, contrario a lo que pregona el gobierno, esta industria
no genera tantos ingresos como se le quiere hacer creer al pueblo; debido a
esto la máxima autoridad de la Provincia supo decir que se están encaminando proyectos
que permitan a Zamora Chinchipe tener nuevos ingresos sin la necesidad de depredar
el medio ambiente.
Luis
Sánchez, representante de la comunidad indígena Cascomi de la Parroquia
Tundayme declaró que “más allá de
defender esta casa de cuatro paredes que ya fue destruida y afectaron a treinta
familias, shuar y kichwas, queremos también dar a conocer que consideramos a
esta selva viva como nuestra casa porque es donde desarrollamos todas las
actividades diarias y sobre todo creemos que esas montañas y cascadas como
sagradas (...)”
Blanca
Chancosa, vicepresidenta de la Ecuarunari, fue un poco más allá al asegurar que
algunas de las ordenanzas que se han aprobado en los últimos años han sido para
beneficiar a estas concesiones y a las empresas transnacionales más no para las
personas de aquellos lugares en donde se ubican las minas, habló puntualmente
de la Ley de Tierras y territorios ancestrales.
“Aparentemente quiere el Gobierno ser muy
generoso al darnos las escrituras de las tierras, pero la intención detrás de
eso no es asegurar que esa tierra sea suya para respetar, sino asegurar que
usted tome la tierra para que las compañías vayan, le ofrezcan dinero y usted
venda su lote, esa es la intención de esta ley (…)”
Como
último punto de la asamblea se analizó la situación política y administrativa
de Zamaskijat, Rogelio Andrade aseguró que los grupos comunitarios están siendo
amenazados por el poder central con el fin de fraccionarlos e instó a tomar una
postura firme, a no dejarse engañar por falsas promesas y respetar la legitimidad de las
organizaciones.